top of page

Opinión: La inseguridad en los barrios

  • Foto del escritor: Chacabuco Al Día
    Chacabuco Al Día
  • 27 ago
  • 3 Min. de lectura

Por: Máximo Quitral Rojas, Analista Político - IG: @maximo_quitral


FOTO: PDI
FOTO: PDI

Durante mi participación como panelista en la televisión abierta, ya sea en el “Buenos Días a Todos” de TVN y en el “Hola Chile” de La Red (por dios, qué recuerdos) me adelanté en señalar que la inseguridad sería uno de los principales problemas que vivirían las comunas de Santiago y de todo el país. Algunos televidentes no creyeron en mi vaticinio, pero el tiempo me terminó por dar la razón. No es que yo sea un pitoniso o tenga una bolita de cristal, pero basta con tomar el transporte público para darse cuenta del deterioro de la ciudad, de las bandas robando celulares a los vecinos trabajadores que esperan el Transantiago o viajan cansados y apretados en un bus oruga.


Las autoridades electas no entendieron el problema y eso se tradujo en ausencia de vigilancia comunal para proteger a los vecinos, desinterés del Estado por combatir al narcotráfico y al crimen organizado y ausencia de personas idóneas para combatir la delincuencia en las comunas más grandes del país, como lo que pasa en Maipú. Esa desidia y esa apatía con el sentir vecinal hoy lo están pagando las comunas y la gente de esfuerzo. Hagamos un poco de memoria histórica.

Máximo Quitral Rojas, Analista Político  @maximo_quitral
Máximo Quitral Rojas, Analista Político @maximo_quitral

En el año 2021 el Observatorio del Narcotráfico en 2021 identificó a dos carteles mexicanos y un cartel colombiano operando en territorio nacional. Estos serían “Jalisco Nueva Generación”, Sinaloa (El Chapo Guzmán) y el “Cartel del Golfo”, del Valle de Cauca. Lo preocupante de estas organizaciones criminales es que establecieron alianzas con grupos locales para empoderarse e imponer el terror en las principales comunas y ciudades del país, debilitando con esto al Estado y permeando toda la institucionalidad. Pero no es lo único que se detectó, pues el informe estableció que la pandemia empujó el incremento en la producción de marihuana local y de drogas sintéticas, lo que posibilitó que grupos internos entraran al mercado de la droga y se aliaran con estas bandas organizadas para ampliar el consumo, su producción y la oferta entregada. El dilema de esto es que el uso de la violencia como forma de resolución de conflictos se instaló como el principal mecanismo de imposición del poder, acción que insegurizó al país y amedrentó a la sociedad, de lo cual ya he escrito anteriormente. Por tanto, una primera explicación sobre el alza del uso de la violencia en comunas como Maipú, Estación Central, Lampa o Quilicura, se debió a la disputa territorial entre estas bandas transnacionales y otras bandas locales.


El resultado de este duro panorama se traduce en que la delincuencia se ubicó como la principal preocupación de los ciudadanos de manera histórica (Enusc 2022) y este panorama lo confirmó un estudio de la Universidad San Sebastián (USS) titulado “Chile Nos Habla de Seguridad” publicado en el primer semestre de 2025. El 80% de los encuestados consideró que la delincuencia había aumentado en el país y a nivel comunal ese dato llegó al 73,8%. O sea, mi proyección no estuvo errada.


La sensación de miedo también aumentó en las personas (era que no), encontrando la encuesta que siete de cada diez personas sienten mucho temor y un 66% de los consultados evita salir de noche por la inseguridad. ¿Es este el país que queremos? Yo por lo menos no quiero que las personas estemos encerradas y con miedo, por lo que se hace necesario empujar por medidas, que busquen entregar seguridad a los vecinos honestos y trabajadores. Una idea sería fortalecer las mesas de seguridad en los barrios, tal como lo está haciendo el Barrio La Farfana en Maipú, idea exitosa y perfectamente replicable en todo el distrito 8. Pero de ello te contaré en la próxima columna

Comentarios


bottom of page